Un paraiso para las compras
En su equipaje no pueden faltar algunos de los tesoros locales, aquellos que le harán revivir con una sonrisa su paso por la isla. Algunos son indispensables como los de la casa Hierbas de Ibiza Perfumes: su inimitable creación estrella es el Agua de Colonia Fresca, cuya fragancia completa una línea de productos compuesta de Sales de Baño de las Salinas de Ibiza, Gel de Baño, Bálsamo Corporal Hidratante, Vela Perfumada, Jabón en Pastilla y Colonia Sólida en cajita de plata numerada; sus productos son todo un ‘must have’ no solo en Ibiza, sino también en las boutiques más cool y trendy de medio mundo (Nueva York, Milán, Londres, Tokio…).
Bajando a nivel de mar, la firma Wesselton ha lanzado un anillo con bastante gancho y Majoral nos trae sus siempre interesantes propuestas desde la vecina isla de Formentera. Para los amantes de lo folclórico, pueden resultar de interés las joyas de la emprendada ibicenca, reproducidas con gran fidelidad.
Tiendas interesantes hay muchas, en Ibiza ciudad no puede dejar de visitar a Montgríssimo -de Claude- con su selección de complementos y objetos de culto, La Casita Ibicenca (productos locales seleccionados por el extravagante Snakeman) o en Dalt Vila los exquisitos mini cuadros florares de la boutique Galería Artemisia a base de flores naturales disecadas, piezas únicas realizadas artesanalmente por Jenny con todo mimo. En las afueras del pueblo tenemos también el mega centro Sluiz, que hace gala de un estudiado diseño.
En el pueblo de Sant Josep, nos seduce la estupenda selección autóctona de Claire en el Racó Verd para ofrecernos el más encantador concept store local. Tuck Complementos, de San Antonio, propone una selección de piezas interesantes. Les ‘desvelamos’ KsaR Living, uno de los secretos mejor guardados por los decoradores top level.
Punteros somos también en cuanto a moda de calzado artesano: las sandalias albarcas Ishvara de José Marco, todo un éxitazo que desde la apacible Formentera cruza fronteras para deslumbrar en tiendas top de la 5ª Avenida de Nueva York. O quizás prefiera decantarse por el Taller Mocasín de José Luis y Mayte, que en tan solo tres días le tendrá listos unos mocasines personalizados hechos a medida que le irán como un guante.
Nuestros artesanos producen también diversos curtidos en piel, instrumentos musicales, piezas de cerámica (muchos siguiendo la estela del maestro Joan Daifa), etc. Y por supuesto, no puede olvidarse tampoco del insustituible capazo ibicenco, su sencillez es la clave de su gran elegancia.
Las alpargatas típicas ibicencas, hechas con esparto son otra reliquia, su producción peligraba pero afortunadamente parece que hoy hay varios jóvenes dispuestos a aprender ese arte; nunca estarán lo suficientemente bien pagadas, las auténticas pueden suponer varios meses de trabajo…
